(Grand Hotel de Londres, París)
Viernes
Ayer recibí un telegrama de Tosti en checo. Dale las gracias y dile que, cuando me sienta de humor, le escribiré una canción profana en verso.
Parece que Butterfly no estará hasta fin de mes. En cuanto a Madame Carré*, no es gran cosa, pero espero que acabe haciéndolo bien. No conmueve, a no ser que use esos manierismos falsos que, como no se cansan de decir, son característicos de los parisinos.
Perdona estos excesos míos, querida Sybil, pero tengo confianza absoluta en ti; eres tan buena y estás tan entregada a mí, como yo lo estoy a ti. Me alegrará verte de nuevo; ¿vendrás pronto? Esperaba darte una sorpresa yendo a Londres, pero no puede ser. Tengo que estar aquí todos los días para evitar que se salgan del camino que ya he marcado.
Esta mañana a las once saldré con Vaucaire para ver un coche - pensar en ello me alegra y me distrae. Es simpático, Vaucaire, y hablamos sobre ti mucho.
* Se refiere a Marguerite Guirod, que había debutado en la Opéra Comique en 1901 como Mimì.
Que extraordinario!
ResponderEliminarComo me alegra que me haya encontrado usted, y de este modo he tenido ocasion de descubrir este blog.
Sepa que precisamente me apasiona Puccini, y que pienso devorar sus entradas desde el principio.
Muchas gracias por su visita, monsieur.
Bisous
Fasciante este conjunto de cartas de Puccini a su amada. Gracias por dar a conocer estos aspectos tan íntimos de este gran artista.
ResponderEliminarTe agradezco mucho la visita a Los Líos de la Corte!
Saludos,
Caroline